Consejos de mantenimiento de la prueba y diagnóstico de la polea de embrague del alternador en sobrerrevolucionado
La polea libre del alternador (también llamada polea libre del embrague del alternador) debe revisarse periódicamente para garantizar el funcionamiento correcto de la transmisión de la unidad y evitar daños.
La polea de embrague de rueda libre del alternador se puede comprobar de la siguiente manera:
Paso 1: Prueba dinámica con el motor en marcha
- Abre el capó;
- Arranque el motor y déjelo al ralentí;
- Observe la transmisión por correa;
- Haga funcionar el motor a diferentes velocidades y realice una inspección visual;
- Apague el motor y observe la polea libre del alternador;
El fallo de la polea de embrague puede identificarse porque la transmisión no funciona correctamente y por el ruido que la acompaña. El alternador con una polea de embrague en buen estado debería ralentizarse y pararse cuando se apaga el motor.
Paso 2: Prueba estática con el motor apagado
- Apaga el motor;
- Retire la llave de contacto;
- Retire la correa trapezoidal;
- Retire el tapón antipolvo de la polea del alternador;
- Utiliza una llave inglesa;
- Agarre y sujete el anillo exterior de la polea con una mano;
- Utilice la otra mano para girar la llave inglesa en ambas direcciones;
Si la polea de embrague de rueda libre funciona correctamente, el eje girará libremente en un sentido y se bloqueará en el otro. Dependiendo del fabricante, la resistencia en la dirección bloqueada puede aumentar.
Si no se obtienen los resultados anteriores, debe sustituirse la polea del alternador OAP.
¡¡Instrucciones de reparación !!
Cada vez que se efectúe una reparación en el accionamiento, deberá comprobarse la polea libre del alternador.
Recomendamos los siguientes pasos:
Si se instala un alternador nuevo, sustituya siempre la polea de embrague de rueda libre al mismo tiempo.
Sustituir al mismo tiempo la correa trapezoidal, el dispositivo de sujeción y la polea libre del alternador.
Sustituya el embrague del volante del alternador después de 100.000-120.000 kilómetros como máximo.
Observe las instrucciones de reparación y mantenimiento del fabricante del vehículo correspondiente.